La zanahoria es con diferencia (junto con las hojas de alfalfa), el alimento más rico en provitamina A, lo que la convierte en un auténtico almiento-medicina.
PROPIEDADES E INDICACIONES: La zanahoria contiene una pequeña pero significativa proporción de proteínas (1.03%), la mitad aproximademente que la papa o patata. Las grasas están prácticamente ausentes (0.19%), y los hidratos de carbono suponen el 7.14% de su peso. Es una fuente bastante buena de vitaminas del grupo B, así como de vitaminas C y E. Los minerales y los oligoelementos están todos presentes, incluyendo el hierro (0.5 mg/100 g).
Tres sustancias destacan en la composición de la zanahoria:
Carotenoides, entre los que destaca el beta-caroteno, que nuestro organismo transforma en vitamina A. Los carotenoides son imprescindibles para el buen funcionamiento de la retina, y especialmente para la visión nocturna o con poca luz. También favorecen el buen estado de la piel y las mucosas.
Fibra vegetal: Contiene un 3%, la mayor parte de la cual está en forma de pectina. Normaliza el tránsito y suaviza la mucosa intestinal.
Aceite esencial: Es activo contra los parásitos intestinales.
La zanahoria es muy útil en las afecciones de la retina y de los ojos en general; en los trastornos de la piel; en la gastritis y exceso de acidez; en la colitis; y como preventiva del cáncer.